¿Cuándo interesa ajustar los límites de tu tarjeta de crédito?

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Las tarjetas de crédito son uno de los productos financieros más utilizados y esto hace que, a la vez, sean uno de los que peor se utilizan. Una de las herramientas que siempre se debería tener en cuenta en una tarjeta de crédito es la posibilidad de ajustar los límites de financiación del producto. Vamos a entender por qué y cuándo conviene hacerlo.

Es importante, antes de nada, entender que no todas las tarjetas tienen los mismos límites, y, que, además, en muchos casos estos límites no tienen por qué ser ajustables. Si tuviéramos que indicar tres grandes grupos de límite de crédito en las tarjetas serían los siguientes:

  • Límites bajos: se trata de tarjetas para usuarios medios. Suelen tener límites bajos y no son muy configurables
  • Límites medios: en este caso sería la tarjeta más habitual, con límites medios que pueden configurarse ligeramente al alza y ajustarse a la baja
  • Límites altos: son tarjetas de alto nivel, para clientes exclusivos, con límites muy altos y también muy personalizables. Sin embargo, el hecho de tener límites altos no significa que no los tengan, y de hecho no suelen ser muy flexibles.

¿Cuándo te conviene revisar los límites de una tarjeta de crédito?

En primer lugar, como ya te hemos comentado, lo ideal es hacer un primer ajuste lo más certero posible en el que no solicites un crédito superior al que realmente puedes llegar a asumir. Esto sería importante siempre y en todos los casos.

Una vez ajustado el límite de crédito, la recomendación sería bajarlo cada vez que puedas. E incluso, desde un punto de vista puramente financiero, si pudiéramos eliminar el concepto de crédito asociado a la tarjeta mejor.

El motivo es sencillo, la financiación con tarjeta de crédito, salvo en aquellos casos en los que no se aplica comisiones de manera expresa, es probablemente la más cara del mercado. De hecho, si comparamos una financiación a medio plazo realizada con tarjeta de crédito y un préstamo personal podemos llegar a encontrar diferencias de hasta un 10% o más entre los intereses de una y otra.

Otro momento adecuado para ajustar el límite de una tarjeta de crédito es la contratación de otro producto similar. Acumular tarjetas es, probablemente, una de las peores ideas, sobre todo cuando se trata de tarjetas de crédito.

Por último, también es importante revisar los límites de su tarjeta de crédito cuando te encuentras en una situación de sobre endeudamiento. El endeudamiento por encima de lo que puedes asumir es uno de los problemas más graves de las finanzas personales. En esta situación, hay que controlar al máximo el gasto y, una manera de hacerlo es, precisamente, reducir los costes lo más que se pueda, incluyendo los que deriven del uso de una tarjeta.

 

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